domingo, 27 de octubre de 2013

In memoriam Lou Reed.



miércoles, 23 de octubre de 2013

¿A qué están esperando?




¡Joder, qué tropa!

martes, 22 de octubre de 2013

Les Arts Florissants y Le jardin de Monsieur Rameau.




No soy precisamente fanático de la música francesa del barroco. Además, el asunto del "Jardin des voix", llevado a cabo cada dos años por William Christie para potenciar jóvenes talentos del canto, me olía a chamusquina bienintencionada pero defectuosa. Así que fui al Auditorio con ciertas reservas. 

Como casi siempre, tuve que tragarme los prejuicios injustificados ya desde el primer minuto y, con mejor criterio, me dediqué a disfrutar del primer concierto de la temporada de "Universo Barroco", que desde luego no va a ser el peor. 

Por lo pronto, la orquesta me pareció sencillamente espléndida. Muy certeramente dirigida por Christie, no destacó en lo más mínimo sobre las voces de los muy jóvenes vocalistas. Estuvo siempre comedida, aparentemente fácil, brillante en los momentos más intensos y correctísima cuando "sólo" acompañaba a los intérpretes en segundo término, como en alguna de las arias más delicadas y bellas. Estupenda desde todo punto de vista. 

Pero la tarde del domingo era fue para los cantantes. Eran seis: una soprano (Daniela Skorka), dos mezzosopranos (Emilie Renard y Benedetta Mazzucato), un tenor (Zachary Wilder), un barítono (ictor Sicard) y un bajo (Cyril Constanzo). Y no sabría decir cuál estuvo mejor. Por preferencias personales, las dos mezzos, el barítono y el excelente bajo. 




Todos sorprendieron al auditorio por sus voces tan bien trabajadas (apenas hubo un desliz del tenor, que yo recuerde), la madurez de sus interpretaciones y lo bien escenificadas que fueron sus partes, dando una sensación de ligereza, buen humor y sentido de lo dramático por encima de lo que se podía esperar de gente tan insultantemente joven. 

Aplaudimos a rabiar y nos dedicaron dos bises. El último, creo recordar que fue el coro de "Revenez, tendre amant", de "Les Fêtes d'Hébé", de Rameau, un prodigio de finura, sentimiento y belleza en estado puro. 

Salimos como en las tardes grandes: tarareando las tonadas y comentando con la sonrisa en los labios lo bien que había estado todo y la altísima calidad de la música escuchada. 

A ver si las demás actuaciones están a la misma altura que esto:

sábado, 19 de octubre de 2013

Bonanza indescriptible




Tengo la certeza de que ciertas capas de la población, ya sea por estatus social, ya por pertenencia a diversas sectas o agrupaciones, viven en una realidad paralela. 

Lo sabíamos de los miembros del ejército, la iglesia, el opus dei, los legionarios de cristo, los neocatecumenales y otras gentuzas, así como de los que residen en La Moraleja y residenciales aledaños. 

Al parecer, también a los señores de la gran banca, supuestamente unos linces para esto de la economía, se les escapa lo más evidente. Rebutidos en su burbuja de alto standing, se ve que no les llega para entender que el grueso de la población las está pasando crudas. 

Eso pareció con las declaraciones de nuestro insigne prócer el Sr. Botín, que ve dinero acudiendo a España desde todos los lados. 

Y que los 6 millones de parados, la destrucción de tantos millones de empresas, la precarización de los sueldos y empleos que quedan, el ahogamiento crediticio de pymes y familias y, en general, la falta de perspectivas de que esto vaya a cambiar, sencillamente porque desde el gobierno no se escucha ni una triste propuesta de crecimiento, eso parece ser que no cuenta.

Hay que seguir con el eslogan de que todo va bien, caiga quien caiga. 

Pues que les aproveche eso de intoxicarse con sus propios gases. Los de fuera de la burbujita pasaremos más frío, pero hasta ahora no nos hemos quedado ciegos. 



viernes, 4 de octubre de 2013

No entienden.




Ya he descubierto qué les pasa: no entienden nada. 

No entienden la realidad, ni la sociedad que dicen que gobiernan, ni las nuevas fuentes de energía, ni la necesidad de la investigación para no hundirse en la miseria, ni la del estudio y la cultura para escapar de la barbarie en que pastan tan alegremente, ni la de invertir para progresar, para salir del hoyo profundo en que nos metió su líder. 

Es que, me harto de decirlo, la derecha española ha sido siempre (y es) analfabeta, brutal, arrogante, meapilas y muy hipócrita. Aparte de rencorosa, claro está, pero ése es otro rasgo de los que se sienten investidos por la verdad: todos los que no están de acuerdo por completo con ellos son sus enemigos.

Cómo se explica, si no, que monseñor Gallardón quiera devolvernos a la moralidad farisea de los años sesenta, con sus jovencitas bien viajando a Londres o París para arreglar deslices. Una época en que los gorilas que están al frente del país sí se reconocen, se sienten cómodos, están a sus anchas. 

Es que provienen del franquismo sociológico, no entienden otra cosa que el nepotismo, la especulación y el chuleo al estado, sólo saben promover burbujas. Todo lo que se salga de ahí ya no les cuadra. No saben ni por dónde les da el aire de la actualidad. 

Y así nos luce el pelo, con el país más hundido que recuerdo desde la crisis de los setenta, pero sin la esperanza de que algo vaya a cambiar el panorama. 
Pues ya veremos en qué queda este revival casposo dentro de dos añitos. Tengo ganas.