sábado, 29 de diciembre de 2012

Alguna consideración de final de año. M. Merleau-Ponty.

 
He disfrutado relativamente poco de este otoño que acaba de fracasar hace nada, debido entre otras circunstancias a que por estas fechas el trabajo es excesivo. De todos modos, esta misma mañana he prescindido de gordos y pedreas y me he largado a andar por el campo. 

Había niebla, y no solo en los montes cercanos, por lo que he tardado en reaccionar ante la densidad húmeda de las cosas, su atractivo áspero. Tenía ganas inconfesadas de palpar la textura de la realidad. No me refiero al celofán absurdo que nos recubre a diario, sino de la verdadera juntura por donde aparece el sentido de las cosas. 

¡Vaya! Esto último me ha quedado demasiado Merleau-Ponty. Pero es que las últimas semanas he estado leyendo a (y sobre) el francés en mis viajes diarios en cercanías y me tiene colapsado el cerebro. Por un lado, debido a la dificultad (relativa, no es para exagerar) de entender con seriedad las implicaciones de todos sus planteamientos pero, sobre todo, por la inteligencia finísima que destila en cada comentario, por la belleza de su prosa (a veces carga un poco, pero merece la pena) y por la intuición de que, por una vez, en ese corpus filosófico uno podría habitar sin demasiadas tensiones. 

Pensaba el otro día que quizás sea una de las pocas personas a quienes me gustaría haber conocido. Una lástima su muerte tan temprana, que dejó inconcluso el que podía haber sido su libro definitivo ("Lo visible y lo invisible", Ed. Nueva Visión, Buenos Aires, 2010). 

De todos modos, siguiendo con el paseo en brumas de hace horas, entiendo que los accidentes del paisaje, el camino agradable, la luz extraordinaria que me envolvía, el encuentro casual con paseantes que gustan de charlar brevemente, hacen de estas salidas al aspecto más recio de la realidad algo tan imprescindible como el reverso gastado que nos agobia. 


 Ahora que ya sabemos que no nos vamos a jubilar hasta que estemos lo suficientemente mal para durar unos pocos años y no dar demasiado la lata al contribuyente del futuro, entiendo que más que nunca va a ser obligado escaparse en los momentos de ocio, o crearlos de algún modo. Yo ya me entiendo. Pero las cosas pintan tan mal como se sospechaba, si no peor. Habrá que ir viendo lo que estos animales son capaces de hacer con el mal llamado "estado de bienestar". Y lo que la oposición propone para dentro de tres años, suponiendo que tenga huevos para proponer algo. 

Ya me creo cualquier cosa.  

lunes, 17 de diciembre de 2012

John Cage, por Bertrand Chamayou



Hoy iba de contemporánea (ya era hora, porque entre el barroco y lo de la Batiashvili empezaba a salirme peluca empolvada). Y el concierto ha estado dedicado al centenario del nacimiento de John Cage. 

Muy divertido ver el pianito de juguete con que Chamayou ha interpretado su "Suite for toy piano" (1948) o los diversos vegetales martirizados para deleitarnos con "Child of tree". 

Por cierto, que no conocía la primera suite y me ha parecido bastante buena y no tan ingenua como su instrumento puede hacernos pensar. 

Luego, varias sonatas para piano preparado de los años cuarenta, otras para piano "normal" y esta pieza que les dejo, titulada "In a landscape" (1948), que quizás ha sido la más asequible para el oído no acostumbrado a las repeticiones, disonancias y (a ratos) coñazos de Cage. Que, por otra parte, es imprescindible en la música del siglo pasado. 





Un tanto "new age", ¿no? Pero hay que ver en qué época se compuso y luego decir: "¡Ah! Pues no está nada mal".

domingo, 16 de diciembre de 2012

Lisa Batiashvili.




Hoy tocaba matinée en el Auditorio. El programa no era muy interesante, pero no me podía perder a la violinista Georgiana Lisa Batiashvili; en este caso, tocando el Concierto para violín y orquesta en re mayor, opus 35, de Chaikovski. No es que el nacionalismo musical me vuelva loco, pero ese concierto tiene una fuerza poco común. 

Mucho mejor que la Suite nº. 4, "Mozartiana", un pestiño romanticón del que solo se salvan (parcialmente) la Giga y el movimiento final. Por lo demás, la segunda parte del concierto anunciaba "Las campanas" (Kolokola) de Rachmaninov, con la Orquesta y Coro Nacionales de España al completo, dirigidos por J. Luis Cobos. 

He de decir que la orquesta y coro han estado a un gran nivel. Sobre todo, me ha parecido de perlas la interpretación de Rachmaninov, con un barítono, Alewey Tikhomirov, de voz poderosa y convincente. 

Pero la estrella era la Batiashvili. Y, de verdad, pienso que hay obras que deben "verse", no solo escucharse, en directo. Porque estar en primera fila y comprobar la textura de la música y el esfuerzo físico e intelectual que demanda para ser interpretada con la belleza, potencia y precisión que hemos oído esta mañana... Eso es otra cosa. 

Creo que el Stradivarius que toca Batiashvili está cedido por una fundación japonesa. Hoy sonaba como un trueno, como una pluma, como el mar. Excelso en los graves, estratosférico en el limite de los agudos, que la obra reclama en más de una ocasión. En fin, el colmo del virtuosismo. 

Pero no bastan, como decía hace nada de la Bartoli, grandes dotes técnicas para emocionar y convencer. Es preciso algo más: sensibilidad, inteligencia, pasión, y de todo eso tiene Lisa Batiashvili en abundancia. 

Hoy me ha levantado de la butaca, y no es fácil entusiasmarme con piezas que no me convencen demasiado. ¿Y saben cuánto costó la entrada? 

Trece euros. En el patio de butacas. 

sábado, 15 de diciembre de 2012

Del loor de Espanna como es complida de todos bienes


Dice el rey Alfonso X:

"E cada una tierra de las del mundo et a cada provincia honró Dios en señas guisas, et dió su don; mas entre todas las tierras que ell honró más, Espanna la de occidente fue; ca a esta abastó él de todas aquellas cosas que homne suel cobdiciar. (E los godos) fallaron que Espanna era el meior de todos, e muchol preciaron más que a ninguno de los otros, ca entre todas las tierras del mundo Espanna ha una estremanza de abondamiento et de bondad más que otra tierra ninguna. 
(...)Pues esta Espanna que decimos tal es como el paraíso de Dios, ca riega se con cinco ríos cabdales que son Ebro, Duero, Tajo, Guadalquivil, Guadiana; e cada uno dellos tiene entre si et ell otro grandes montañas et tierras; et los valles et los llanos son grandes et anchos, et por la bondat de la tierra et ell humor de los ríos lievan muchos frutos et son abondados, Espanna la mayor parte della se riega de arroyos et de fuentes, et nuncual minguan pozos cada logar o los ha mester. 
Espanna es abondada de mieses, deleitosa de fructas, viciosa de pescados, sabrosa de leche et de todas las cosas que se della facen; lena de venados et de caza, cubierta de ganados, lozana de caballos, provechosa de mulos, segura et bastida de castiellos, alegre por buenos vinos, folgada de abondamiento de pan; rica en metales, de plomo, de estaño, de argent vivo, de fierro, de arambre, de plata, de oro, de piedras preciosas (...)
Espanna sobre todas es engeñosa, atrevuda et mucho esforzada en lid, ligera en afán, leal al señor, afincada en estudio, palaciana en palabra, complida de todo bien (...) ¡Ay Espanna! non ha lengua nin engeño que pueda contar tu bien.
Pues este regno tan noble, tan rico, tan poderoso, tan honrrado, fue derramado et astragado en una arremesa por desavenencia de los de la tierra que tornaron sus espadas en si mismos unos contra otros, así como si les minguasen enemigos; et perdieron y todos, ca todas las cibdades de Espanna fueron presas de los moros et quebrantadas et destroidas de mano de sus enemigos"

viernes, 14 de diciembre de 2012

La Bartoli en Madrid con la Kamerata Basel.


Había un sofá rosa en un extremo del escenario y allí esperó la diva, toda sonriente, mientras la estupenda, finísima Kamerata de Basilea interpretaba oberturas de diversas óperas de Agostino Steffani (1654-1728).

Cuando comenzó a cantar fue la debacle. Para mí, la parte inicial, con arias de "Tassilone", "Niobe, regina di Tebe" e "Alarico il Baltha", resultó la más espectacular. 

En un tempo lento y con una voz moduladísima, intensa, que inundaba el espacio hasta no consentir sino un silencio absoluto, de repente sentí que estaba inmerso en su delicada dicción, nadador sumergido en el flujo de esa voz exquisita, en una corriente de sensibilidad inacabable de la que no se adivinaba la orilla. Y seguía fluyendo con una calma poderosa que me arrastraba...

De verdad que lo de anoche fue de pasmo. No es solo achacable a sus inmensas dotes naturales, ni siquiera a la técnica depuradísima que gobierna con maestría. En realidad, se trata de inteligencia artística, de puesta a punto gozosa de tantos medios extraordinarios por una voluntad férrea y unas capacidades de interpretación, de entendimiento, quiero decir, que difícilmente se pueden encontrar en otra intérprete actual. 



Ayer yo tenía la sensación de estar asistiendo a un magno acontecimiento. Más aún, cuando cuatro voceras milaneses habían intentado agraviarla pocos días antes en la Scala. Así que hubo también un punto de reivindicación. Un punto. El resto estuvo más que justificado. 

La segunda parte del concierto, más vibrante, fue un ejercicio casi gimnástico de capacidades vocales que dejaban patidifuso al más pintado. Aquí el público ya no dejó de vitorearla tras cada aria, cosa que ella agradeció con una naturalidad no exenta del tono profesional que se espera de una artistaza como ella. 



 Porque a ratos estuvo ligera, graciosa, divertida. Otros, brava como las tempestades de agudos que nos lanzaba sin compasión. También se la vio sufrir con las heroínas de las óperas que desgranaba. O coquetear con las flautas, o competir a gorgoritos con la trompeta barroca, que cada día me parece de ejecución más dificultosa. 

Y los bises, tres arias de Haendel, incluida "Lascia la spina", que, a pesar de ser muy consabida, sigue emocionándome, fueron el final de fiesta más espectacular que recuerdo desde lo de Jaroussky en el Teatro Real. 


¡'Vaya noche!


sábado, 1 de diciembre de 2012

"Un árbol. Una roca. Una nube". Carson McCullers




(Carson McCullers)

(...) -Es esto. Escucha atentamente. Medité sobre el amor y saqué la conclusión. Me di cuenta de qué es lo que nos pasa. Los hombres se enamoran por primera vez. Y ¿de qué se enamoran?
    La tierna boca del niño estaba medio abierta y no contestó. 
-De una mujer -dijo el viejo-. Sin sabiduría, sin nada para poder ir por ahí, emprenden la experiencia más sagrada y peligrosa de este mundo. Se enamoran de una mujer. ¿Es esto, no, hijo?
-Sí -dijo el chico desmayadamente.
-Empiezan por el revés del amor. Empiezan por el punto crítico. ¿Te das cuenta de por qué es algo tan desgraciado? ¿Sabes cómo deberían querer los hombres?
    El viejo alargó la mano y agarró al chico por el cuello de la chaqueta de cuero. Lo sacudió suavemente y sus ojos verdes miraron hacia abajo sin pestañear, graves.
-Hijo, ¿sabes cómo debería empezarse el amor?
    El chico seguía sentado, pequeño, callado, tranquilo. Poco a poco meneó la cabeza. El viejo se acercó más y murmuró: 
-Un árbol. Una roca. Una nube.

(Incluido en la colección de cuentos "La balada del café triste")

El Cuarteto Tokio, en el Auditorio




Ayer actuó el Cuarteto Tokio en el Auditorio Nacional de Madrid. Como siempre, estuvieron a inmensa altura, tanto en lo referente a la técnica, apabullante pero humilde, sin alardes innecesarios, solo con su acostumbrada brillantez y precisión, como en lo tocante a sensibilidad e inteligencia para abordar las obras. Que no fueron más que dos cuartetos de Bartók y uno de Lera Auerbach. 

Del ultimo cuarteto interpretado, el nº 4 de Béla Bartók, me he quedado con el virtuosismo casi sobrenatural del 2º movimiento, un prestissimo tocado con sordina...




... y con el 4º movimiento, todo él en pizzicato, que es de lo más espectacular, intenso, divertido y preciosista que puede escucharse en una sala de cámara. 





A quién va a extrañar ahora que Bartók sea un maestro inigualable del siglo XX. Pero es que a veces uno se olvida de lo buenos que son estos "viejos" y lo fácil que resulta quedarse boquiabierto con los cuatro mangantes que te descubren el Mediterráneo a golpe de promoción comercial.  

Pues eso: quien quiera darles sopas con onda, que deje el arco en el suelo, toque sólo con la yema de los dedos y a ver qué tal le sale. ¡No te digo..!

miércoles, 28 de noviembre de 2012

"Artaserse", de Leonardo Vinci, con Philippe Jaroussky


Y aún mejor me parece el también reciente "Artaserse", de Vinci, autor barroco casi desconocido, con la estrella del momento, Philippe Jaroussky, amén de otros cuatro contratenores (Cencic entre ellos, otro que, sin las inmensas dotes del anterior, también es un maestro de la técnica, como demostró en el disco de duetos interpretado al alimón) y un tenor. 




Son tres discos que quitan el aliento. Quien me iba a decir a mí, que detesto la ópera verista del siglo XIX, el entusiasmo con que escucho la barroca.  Hasta soporto los recitativos.






El disco, además, cuesta poco más de veinte euros. Y luego dirán que el pescado es caro...


martes, 20 de noviembre de 2012

LOE-LOMCE: lo mismico, maño.


Preámbulo de la LOE (2006): 

“Las sociedades actuales conceden granimportancia a la educación 
que reciben sus jóvenes, en la convicción
de que de ella dependen tanto el bienestar individual como el
colectivo. La educación es el medio más adecuado para construir su
personalidad, desarrollar al máximo sus capacidades, conformar su
propia identidad personal y configurar su comprensión de la realidad,
integrando la dimensión cognoscitiva, la afectiva y la axiológica.
Para la sociedad, la educación es el medio de transmitir y, al mismo
tiempo, de renovar la cultura y el acervo de cono­cimientos y valores
que la sustentan, de extraer las máxi­mas posibilidades de sus fuentes
de riqueza, de fomentar la convivencia democrática y el respeto a las
diferencias individuales, de promover la solidaridad y evitar la
discri­minación, con el objetivo fundamental de lograr la nece­saria
cohesión social. Además, la educación es el medio más adecuado para
garantizar el ejercicio de la ciudada­nía democrática, responsable,
libre y crítica, que resulta indispensable para la constitución de
sociedades avanza­das, dinámicas y justas. Por ese motivo, una buena
edu­cación es la mayor riqueza y el principal recurso de un país y de
sus ciudadanos.”

Primer párrafo del Anteproyecto de la LOMCE (2012) (Ley Wert): 

“La educación es el motor que promueve la competitividad de la economía y
las cotas de prosperidad de un país; su nivel educativo determina su
capacidad de competir con éxito en la arena internacional y de
afrontar los desafíos que se planteen en el futuro. Mejorar el nivel
de los ciudadanos en el ámbito educativo supone abrirles las puertas a
puestos de trabajo de alta cualificación, lo que representa una
apuesta por el crecimiento económico y por conseguir ventajas
competitivas en el mercado global.”

¿Encuentras alguna diferencia?

viernes, 16 de noviembre de 2012

"Mission", de Cecilia Bartoli






Con esta mirada fulgurante ha presentado Cecilia Bartoli su disco "Mission", dedicado a la obra de Agostino Steffani (1654-1728). Está acompañada por I Barocchisti y Diego Fasolis. 

Aparte del fastuoso libreto en tres idiomas, con abundantes ilustraciones y el texto completo de las composiciones interpretadas, hay varias colaboraciones de Philippe Jaroussky. La que incluyo es de las más emotivas en un disco que no se caracteriza precisamente por pasar desapercibido o ser neutro desde un punto de vista artístico o emocional. 

Cuanto más lo escucho, más me maravilla lo bien que canta esta mujer. Y fíjense en que a la Bartoli la tengo controlada desde hace años (sin ir más lejos, el 13 de diciembre actúa en Madrid y tengo entradas para escucharla). A ratos es tan bello que parece fácil, como si cualquiera pudiera hacerlo así de bien. No hay nada como la sabiduría, la capacidad técnica y la pasión para acercar obras remotas a nuestra sensibilidad. 

En definitiva, un lujazo para los sentidos. Como para perderse la actuación. 


sábado, 10 de noviembre de 2012

Sueños.




Tengo una cama articulada porque necesito que los sueños se aposenten en posturas más cómodas o puedan plegarse a voluntad. La mayor parte están tan alterados que no conviene dejar que fluctúen a su aire. Sin ayuda, reproducen nimiedades fuera de sentido, van vuelven  repetidamente con resultados cada vez más siniestros, reparan en las rendijas que quiero mantener al margen y siempre, siempre, se revelan como muy torpes consumadores de cualquier desastre. 

En cierto modo, son como el momento de desaire para el creador, ese en que se le desmarcan los actores de su obra y tiene que acudir a verlos correr en solitario, sorprendiendo con su feliz escapada a quienes los guiaban con nociones consabidas. 

Las pesadillas más recias se reblandecen en mis noches, de modo que no consigo hacerlas entrar en su cubículo de horrores. Persisten en esa visión esbafada(*), retrospectiva, levemente rancia, que ni aterra ni consuela. Lástima de mal soñador en que me he convertido. A ver si con esta cama nueva se avienen con su esencia original. 

Por lo menos, las apneas han desaparecido. Creo que este invierno conseguiré no ahogarme en mitad de la madrugada. Concilio mejor el sueño desde que me doblo por la mitad. Quizá tenga algo que ver con los sucesos que no dejan de llegar en la vigilia. Tendremos que pensar que, en estos tiempos medio aspros(**), mantener integridades ha pasado de mera entelequia a sucesión de cotufas en el golfo. 

Probablemente, el empeño de domeñar las excursiones nocturnas de mi conciencia por paisajes inquietantes puede tener su utilidad práctica. Hay que pensar en todo, con la que está cayendo (***).





(*) Para quien no sea aragonés, vale decir "descafeinada". 
(**)  "       "       "    "         "            "      "     "ásperos".
(***) Para mis lectores de allende los océanos, esta ha sido la frase estrella en España durante los últimos cinco años. Y lo que nos queda.

martes, 6 de noviembre de 2012

Lorena Álvarez y su Banda Municipal





Bien: hasta aquí hemos llegado. Escuchen mis ávidos lectores la última sensación del indie nacional. Y no bromeo. Esta chica tiene una desfachatez medio ingenua, medio provocadora, una capacidad de mezclar ritmos y llevarlos a su coté que resulta higiénica y refrescante en medio de tanta emulación de émulos de refritos del pop internacional.

Sus letras son dignas de prestar muchísima atención. Cualquiera las tacharía de intrascendentes por lo coloquial del tono, pero a ratos te sorprenden, otras veces inquietan o te hacen reflexionar sobre la desfachatez noble y bastante naïve de Lorena para confesar lo que confiesa de manera tan descarnada...

Lástima que desde el punto de vista técnico no vaya muy sobrada. Al menos, por ahora. Tampoco lo necesita, pero en posteriores entregas va a tener que esmerarse para superar el bombazo que está suponiendo su disco "Anónimo". Esa guitarra "caldero" de fiesta de adolescentes provincianos...

Yo estoy encantado. Ahí va otra píldora más, para que se empapen. 


domingo, 4 de noviembre de 2012

Mucho otoño




Este otoño de estupefacción que nos ha venido casi de improviso tiene la estructura de un largo resfriado, pero no su misma sensación sobre la piel. 

Acabo de salir del hospital (solo como acompañante; esta vez no me ha tocado) y, supongo que por efecto de las horas reducido al absurdo, creo que la realidad está un poco desenfocada. No encajan los sonidos con los movimientos, el color se desvincula del objeto y parece oscilar hacia tonos más graves. Cae sobre el mundo un mundo de pesadez.

De entre todas las moradas que puede elegir el intelecto para residir durante un corto período de tiempo, la espera es sin duda la más abrasiva. No la esperanza de que algo se resuelva, sino la permanencia en un estadio de indefinición tediosa, de mecánica desarreglada que acaba por no saber dónde ni por qué. 

Ahí sucumben todas las potencias, se desconfigura nuestra capacidad de sentir y analizar, acaba uno transigiendo con esas neutralidades (conversaciones sin sentido, asentimientos que no conllevan ninguna voluntad) y, por último, se desvanece toda sombra de comprensión. Hemos perdido la forma antigua de las cosas ciertas, el color, su urgencia necesaria. 

Hasta que este panorama cambie, hasta que vuelva a situar mis piedras en las encrucijadas apropiadas, creo que tendré que sostener otra larga pelea con las tendencias que el no-ser me ha adherido. Vaya, que debo volver a conquistar el momento y el espacio. Los sonidos, por fortuna, están llegando ya. 


lunes, 29 de octubre de 2012

El caso del Concurso Ciudad de Burgos


Veamos lo sucedido esta semana en el Concurso de Poesía Ciudad de Burgos. Resultó ganador de los 7.200 € y la publicación en Editorial Visor el poeta Daniel Rodríguez Moya, con "Las cosas que se dicen en voz baja". 

Pues bien: el día 27/10, el Diario de Burgos anuncia que los dos pre-seleccionadores del premio, Ricardo Ruiz y Pedro Olaya, han escrito una carta informando de que el poemario premiado no estaba entre los 11 finalistas (de 141 presentados) y, por tanto, acusando al jurado de incluirlo a ultima hora, a pesar de su baja calidad, exclusivamente para ser premiado. 

Se da la circunstancia de que el ganador es granadino, igual que el presidente del jurado, el muy honorable Luis García Montero, y de que ya había publicado varios libros en Editorial Visor, la encargada este año de publicar el libro. Chus Visor, honorable director de la misma, también figuraba entre los miembros del honorabilísimo jurado, que se completaba con los no menos honorables señores Joan Margarit, Jesús Jiménez y Luis Morante. 


                  (De derecha a izquierda, García Montero, 
                   Chus Visor y Benjamín Prado)

Para los dos pre-seleccionadores, "esta actitud pone en entredicho la credibilidad y honestidad de quienes han realizado el trabajo previo y cuestiona la imagen del Ayuntamiento de Burgos, entidad organizadora. Que este comportamiento sea moneda habitual en los concursos, como reconocen sin tapujos estos impúdicos vates y sus cómplices, no les exime de una responsabilidad ética y moral que debe primar en aquellos comportamientos que afectan a terceros, en este caso a la entidad patrocinadora, a los responsables de la selección rigurosa de los trabajos y, por supuesto, al resto de autores finalistas del certamen". 


Asimismo, denunciaron "la actitud que tanto la editorial Visor como algunos acreditados miembros del jurado que, presumiendo de ética, han puesto en práctica para premiar un trabajo que, dada su escasa calidad, no había sido seleccionado previamente y que no dudaron en incluir entre las obras finalistas para, sin recato ni pudor alguno, otorgarle el reconocido premio poético".


Hasta aquí, lo habitual en tanto premios literarios, cosa que tengo bien denunciada en este blog, y que de tan común ya no llama la atención. Lo que más me ha gustado del asunto es las declaraciones de nuestro querido Luis García Montero, adalid de la postura ética de izquierdas, que se mostró: 

"Muy sorprendido por el tono de furor y de injusticia que han utilizado los preseleccionadores", indicando que no son miembros del jurado, sino una ayuda y que (…) "Cuando al responsable de la editorial o a un miembro del jurado le llega la noticia de que alguien se ha presentado al premio, tiene derecho a pedir que su libro se añada a la deliberación. Esa es la costumbre establecida en la inmensa mayoría de los concursos literarios y eso es lo que ocurrió en el Premio Ciudad de Burgos". 

Más aún, García Montero añade que estos pre-seleccionadores: "Con su soberbia y su agresión ensucian el nombre público de personas respetables y desaniman a las instituciones que deciden apostar por la poesía en tiempos difíciles para la cultura".

"Pero, de la misma forma que en las bases se especifica que el fallo es cosa del jurado", contrarresta el Diario de Burgos, "en ningún punto de las mismas se hace referencia a esa ‘costumbre’ de la que habla García Montero".

(véase la noticia completa en: http://www.diariodeburgos.es/noticia/Z3D60CD2D-DDBE-1B23-E3F1629188182037/20121027/polemica/decision/jurado/cuestiona/limpieza/premio/ciudad/burgos)

Dicho de otro modo: la desfachatez es tanta y la sensación de impunidad tan evidente que el mamarracho en cuestión se permite apuntar la "costumbre" ( o sea, el pasteleo habitual) como un hecho favorecedor de la literatura, mientras que la limpieza y rectitud son consideradas "furor e injusticia".

Así nos luce el pelo en este país: ¿a alguien le suena eso de que ciertas empresas privadas utilicen los recursos públicos para fomentar sus negocios?

sábado, 27 de octubre de 2012

Cómo comer sushi (The Japanese tradition).


Realmente, es una lástima que este descacharrante vídeo no esté subtitulado en español. Pero como sé que mis cultísimos lectores dominan el inglés, ahí, va, para deleite de la muchachada. 





A ver quién se atreve luego a afirmar que los nipones no tienen sentido del humor.

miércoles, 24 de octubre de 2012

"El Parnaso", de Estevan Daça





Quando las desdichas mías 
pienso que se han de acabar, 
se tornan a començar. 

Si ventura, de piadosa, 
alguna dicha me ordena, 
desdicha la desordena, 
que es en mi mas poderosa.

Nunca se atraviesa cosa
en que me pueda dañar
que no torne a començar. 


Gran interpretación la de El Cortesano (José Hernández Pastor, contratenor, y Ariel Abramovich, vihuelista) de este "villancico a cuatro" de Estevan Daça, vallisoletano de la segunda mitad del siglo XVI. 

Quizás en este comienzo de otoño necesite de este "El Parnaso", libro para vihuela y voz tan delicado y frágil, a la vez que evocador y ligero. 

Reconozco que la música renacentista no tiene el atractivo inmediato de la barroca, ni su riqueza de contrastes, ni la madurez instrumental y de composición que alcanza apenas cincuenta años después. Hay que tener una actitud abierta para penetrar en sus aparentes monotonías. Los frutos merecen la pena, lo aseguro. 


viernes, 19 de octubre de 2012

"Sweet Tooth" , de Ian McEwan



No resistí la tentación de leer la última novela de Ian McEwan antes que apareciera traducida al español (*), y la verdad es que me ha gustado bastante. Mucho más que "Chesil Beach", desde luego, pues me pareció un tour de force literario algo forzado y poco interesante, pero menos que "Expiación" (para mi gusto, su mejor obra de los últimos años). 

La acción está situada en Inglaterra a principios de los años setenta. La protagonista, Serena, es introducida por un antiguo amante en el MI5, los servicios secretos británicos. Allí se le ordena contrarrestar la entonces sólida posición de los comunistas en el mundo intelectual, apoyando a autores que se desmarcan de esta tendencia bajo la cobertura de una fundación filantrópica. Desgraciadamente, se involucra en una relación amorosa con uno de esos escritores, un joven prometedor en el comienzo de su carrera. Su posición entre dos situaciones contradictorias e irreconciliables lleva a un final abrupto que es, sin duda, el mayor encanto dela novela. 

Porque McEwan está como siempre: algo tramposillo, eficaz narrador, fino prosista y un fenómeno con los cierres de la novela. Ya en "Expiación" forzaba al lector magistralmente a reconsiderar cada línea que había leído, a encajar de nuevo las piezas y darles su sentido final, que distaba bastante del que había supuesto hasta el momento. En "Sweet Tooth" (algo así como "Goloso" o "Golosina", traducido literalmente) vuelve a sus buenos hábitos y nos regala un final sorprendente, no tan logrado como aquel pero, no obstante, una maravilla de buen hacer y de relojería estructural que a más de uno dejará con la boca abierta. 

A ver si la traducen pronto.  



(*) Fue publicada en Inglaterra el 21 de agosto de este año y supongo que pronto lo hará aquí Anagrama.

domingo, 7 de octubre de 2012

Well, let's talk politics... (*)



Como soy un pesado, de vez en cuando recurro a la memoria. Y estos días no he podido evitar acordarme del en su momento apocalíptico plan Ibarretxe. Que fue generado y desarrollado en el arrogante, estúpido, brutal segundo cuatrienio de Aznar (2000-2004) y deshecho en un instante al poco de entrar a gobernar Rodríguez Zapatero. 

Recordemos cómo al bueno de Ibarretxe se le dio la oportunidad de expresarse y debatir su plan en el Congreso de los Diputados. Y cómo se votó, se rechazó y, cuando quiso darse cuenta, ya estaba el Lehendakari de vuelta en Vitoria y preguntándose: "¿Qué me ha pasado, pues?" 

Lo que era una amenaza tremenda a la unidad del país, un reto independentista, una colaboración con el terrorismo etarra y bla, bla, bla, pasó a ser una larga cambiada, faena de aliño y, ¡zas!, el morlaco es devuelto a los corrales. Con elegancia. Con clase. Con todas las garantías, legitimidades e incluso cortesía democráticas. 

Veamos lo que sucedió el otro día entre Artur Mas y Mariano Rajoy: venía el catalán con el "Me va a decir que no a lo que le pido" por delante. ¿Qué hizo Mariano el Corto? Decir que no tajantemente. Con dos cojones. Porque sí. 

Más aún: pocos días después se celebra la conferencia de presidentes de Comunidades Autónomas. Protocolo: se sientan los presis según el orden cronológico de aprobación de su correspondiente Estatuto de Autonomía, de más a menos cerca del Presidente del Gobierno de España. Primero, Patxi López, segundo, Artur Mas. ¿Qué hace Marianico? Coloca a la repipi de la Soraya (Sáenz de Santamaría) entre Mas y él, cosa que nunca había sucedido. Otro agravio infantil, gratuito, estúpido y, sobre todo, inútil. Porque Mas, a pesar de lo que parecía, no se ha plegado a las exigencias de recortes de déficit que impone. El, que es el que antes y más ha recortado en su comunidad. Hay que ser cenutrio para cometer torpezas de este calibre una y otra vez.

Algunos dicen que todos los políticos son iguales. No es cierto. Los hay mucho más torpes. Parece ser que la derecha troglodita que padecemos se lleva la palma en este aspecto. Así como del plan Ibarretxe nunca más se ha oído hablar (hasta hace pocas fechas, precisamente), de CiU y del PNV-Bildu seguro que vamos a tener noticias abundantes. 

Me imagino que los augustos regidores de este país serán tan hábiles como de costumbre. Y tendrán que volver los socialistas a arreglar el desaguisado en 2015, como si lo viera. 

(*) Cito a Blaine Raininger, de Tuxedomoon, en una histórica entrevista-actuación con Paloma Chamorro (TVE) a principios de los ochenta, en pleno apogeo de Ronald Reagan en EEUU.

martes, 2 de octubre de 2012

¡Y ahora nos rescatan!



Ya me gustaría que explicaran de quién o de qué exactamente, y quién creó las condiciones para que el príncipe azul venga a salvarnos del fiero dragón en su caballo bayo

Por lo pronto, me veo trabajando hasta que las ranas críen pelo. O hasta que San Juan baje el dedo, y lo tiene de piedra. 



Hablando de eso, mi abuela Libia solía decir: "Eres como los santos de Francia, que tienen ojos y no ven". Se refería a las estatuas de las catedrales del Císter, de origen francés, según deduje más adelante. 

Así están los ceporros que nos gobiernan: sin una triste idea, sin ángulo de visión por las anteojeras neoliberales que llevan puestas. Ciegos. Torpes. Lerdos. De piedra  e inermes ante lo que nos viene. 

Escuché la milonga de los presupuestos para 2013 (otro año triunfal) y no encontré NI UNA SOLA IDEA para reactivar la economía y crear empleo. Nada.

Y es que en este país no se crearán puestos de trabajo mientras no se tire del carro con el sector público, como ha sucedido siempre. ¿O hay que volver al ejemplo del New Deal de Roosevelt para que capten el conceto esas acémilas del gobierno?



sábado, 29 de septiembre de 2012

"Medusa", de Ricardo Menéndez Salmón



Llevaba tiempo esperando de Ricardo Menéndez Salmón la excelencia en el arte de novelar que mostró en sus inicios (con "La noche feroz", por ejemplo) y que sus últimas entregas, si bien todas interesantes y a ratos soberbiamente escritas, no acababan de concretar. 

Ya en entradas anteriores (1) he hablado de sus dotes superlativas y de su capacidad para joder la marrana con exordios a las antípodas de la función narrativa que acababan lastrando e incluso invalidando el conjunto de la novela. 

Comunico con gozo que en "Medusa" ha conseguido dominar esas tendencias disgregadoras y engranarlas dentro de la ficción sin que el artefacto chirríe demasiado. En realidad, le ha faltado poco para que esta novella me entusiasmara. Quizás alguna de las páginas centrales en que Menéndez Salmón recae en los vicios mencionados y se hacen algo indigestas. Sin embargo, son más que compensadas por el final, delicioso a la vez que espectacular, consecuente y muy brillante, en el tono del resto de la narración. 




Para abreviar, diré que la novela trata de la vida de un tal Prohaska, artista (pintor, fotógrafo, cineasta) obsesionado con la imagen artística, con las múltiples manifestaciones de la violencia y el horror humanos, con concretar en un punto inamovible la deriva incesante de la vida, el renovado espanto que esta causa. 

Se trata de una suerte de notario desapasionado que, sin embargo, registra para la posteridad los mayores desastres que los hombres pueden ejercitar contra sus congéneres. La Alemania nazi y sus hecatombes de matadero industrializado, las apocalípticas bombas atómicas en Japón, la Guerra Civil española, las ominosas dictaduras de Hispanoamérica. 



Su ojo desapasionado se posa en algunas de las más demoledoras hazañas del siglo XX y las registra minuciosamente, con la mayor altura estética, para que nadie pueda nunca desapegarse de ellas. El mismo Prohaska es contaminado por la experiencia, pero logra sobrevivir hasta un par de décadas después. 

En fin, no debo desvelar más del argumento porque es menester que el lector aficionado a la buena literatura de verdad lea esta novelita tersa, redonda, apasionante. Está tan bien escrita que, si no tuviera tan poco que ver con mi estilo, me produciría una envidia tremenda. Tanta como desolación deja en el lector tras apurar las últimas líneas de esta magnífica experiencia literaria. 


(1) En la de 17/1/2011, que comenta "La luz es más antigua que el amor", por ejemplo.

Las verdaderas razones.



http://lacomunidad.elpais.com/no-estamos-locos/2012/9/19/rajoy-obligo-dimitir-esperanza-aguirre-tras-bronca-por

En esta noticia se da cuenta de lo que es un rumor generalizado sobre las causas reales de la dimisión de la Aguirre.

Está claro que los dioses, cuando quieren perder a los hombres, les dejan que pequen de hybris. Esta soberbia, tan habitual en España entre los que se aúpan al poder, ya lleva destruidos a varios, y más que caerán. 

Esperemos para ver en qué acaba lo de González, su sucesor. Recordarán la anécdota de este pijotero en Andorra que conté en la entrada de hace cosa de un año y las movidas con el espionaje entre miembros del PP de esta Comunidad. 

Luego, está lo del Canal Isabel II en que también anduvo metido... En resumen, la misma bazofia con cara de niñato bien y cuadrilla de mentecatos e incapaces, pero muy bien colocados  a la sombra de los que han gobernado. 

¡Qué país!

lunes, 17 de septiembre de 2012

No me resisto a copiar este fragmento...


De "El giro", págs. 81-82:

"(Alejandría) contaba con varias atracciones turísticas, entre otras, un teatro impresionante y un gran barrio de mala vida, pero los visitantes siempre se fijaban en una cosa verdaderamente excepcional que había en ella: en el centro, en un suntuoso emplazamiento llamado el Museo, había sido reunida, sin escatimar gastos, la mayor parte de la herencia intelectual de las culturas griega, latina, babilónica, egipcia y judía, y había sido minuciosamente archivada para facilitar la investigación. Ya en el año 300 a. e. v., los soberanos de la dinastía ptolemaica que reinaban en Alejandría tuvieron la acertada idea de atraer a su ciudad a los eruditos, científicos y poetas más destacados, ofreciéndoles empleos vitalicios en el Museo y poniendo a su disposición buenos salarios, exenciones fiscales, alojamiento y manutención gratis, así como los recursos casi ilimitados de la biblioteca. 

Los beneficiarios de tanta liberalidad establecieron unos niveles intelectuales altísimos. Euclides desarrolló su geometría en Alejandría; Arquímedes descubrió el número pi y puso los cimientos del cálculo; Eratóstenes postuló que la Tierra era redonda y calculó su circunferencia con un error de un 1 por 100; y Galeno revolucionó la medicina. Los astrónomos alejandrinos conjeturaron la existencia de un universo heliocéntrico; los geómetras dedujeron que la duración del año era de 365 días y un cuarto, y propusieron añadir un "día intercalar" cada cuatro años; los geógrafos especularon con la posibilidad de llegar a la India en barco zarpando desde España en dirección al oeste; los ingenieros desarrollaron la física hidráulica y la neumática; los anatomistas se dieron cuenta por primera vez de que el cerebro y el sistema nervioso constituían una unidad, estudiaron el funcionamiento del corazón y del sistema digestivo, y llevaron a cabo experimentos en el ámbito de la nutrición. El nivel de los logros alcanzados fue enorme". 


¿Hay quien no vea el cruel contraste con los recortes, la burricie de los que nos gobiernan y la incuria cultural del momento?

Personalmente, a mí me duele este país. 

Así que dimite, ¿eh?




Ni voy a molestarme en vituperar a esa tipeja. Todo lo malo que le suceda lo tiene bien ganado. Es la tipa más nefasta y perniciosa que ha pasado por la política de este país. 

Ya sé que otros iguales o peores van a ocupar su lugar. El problema, me repito, no es la persona, sino quienes la aúpan y mantienen en el poder. 

Pero qué quieren que les diga: hoy hemos celebrado con un buen Ribera del Duero que se largue de una vez. 

El quinto de varios: "El giro", de Stephen Greenblatt.



Todo buen libro lleva al lector atento a otros mejores que el primero. Es lo que me ha sucedido con el excelente "El giro", un ensayo de S. Greenblatt sobre la recuperación en la Edad Moderna de "De rerum natura", de Lucrecio. 

Los curiosos azares en que se vio envuelto el manuscrito, conservado en una abadía alemana hasta que fue recuperado por el humanista italiano Poggio Bracciolini en 1417, así como las no menos interesantes circunstancias de su apreciación y éxito entre las élites culturales europeas y el modo en que las ideas de Epicuro contribuyeron a cambiar la manera de pensar de Occidente son la esencia del libro. Apasionante. 

"El giro" está escrito de modo ágil y muy bien documentado, en la línea de los best-sellers culturales que suelen florecer en suelo anglosajón. A mí me resultan un poco sospechosos, pero esta vez me he tragado las suspicacias. 

Transmite con facilidad la pasión por el saber que embargó a los humanistas del cuatrocientos, de modo tal que, siguiendo el hilo de las historietas de tal o cual personaje, introduce gran cantidad de información sobre el lugar y la época, tan remotos y (para mí) desconocidos, y lo convierte en un libro mucho más denso de lo que aparenta su fachada de cuasi-best-seller. 

Recomiendo encarecidamente su lectura, entre otras cosas, porque abre más puertas y plantea más dudas de las que despeja, cosa que es de las mejores que se puede decir de un ensayo. 

Y ahora me ha obligado a leer "De rerum natura", por supuesto. De ningún modo voy a privarme de disfrutar las maravillas que Greenblatt me ha estado prometiendo toda esta semana



viernes, 7 de septiembre de 2012

El cuarto de varios: "Rehenes", de Stefan Heym




Debo a una gozosa confusión el haber dado con "Rehenes". Sucedió que ya había leído la poesía de Georg Heym traducida a español y asimismo su novela "El ladrón", publicada por Ed. Amaranto-Sipiente. Así que pensé que era otra más del mismo autor, desconocida para mí, y se la compré a Pepito, el de la librería Antígona.  

Pues no. Stefan no es lo mismo que Georg, y supongo que  apellidarse Heym en Alemania es bastante más común de lo que imaginaba. Conque, descubierto el error, la hojeé por encima y, al poco, estaba leyendo "Rehenes" con fruición.

No voy a decir que se trate de una joya de la literatura, pero es una novela deliciosa, ágil, con un tema atrayente y decididamente bien escrita, aunque a veces pueda parecer que muestra menos virtudes de las que realmente tiene.

El comienzo es de lo mejor del libro: en un cafetucho de la Praga ocupada por los nazis desaparece un oficial de la Wehrmacht. A pesar de que a todas luces parece tratarse de un caso de suicidio, todos los presentes son detenidos y considerados rehenes, en tanto se entrega a las autoridades el culpable del "asesinato". Si no lo hace en un plazo de días, serán fusilados. 

Resulta que entre los detenidos está un miembro de la Resistencia que, en comandita con otros dos personajes que forman una trama paralela, ideará un plan para hacer que la barbarie ocupante sea burlada y los verdugos vean sus planes completamente frustrados. 

Así contado, puede parecer un cuento de hadas o una comedieta fantástica. Algo de fantasioso hay en esta historia tremenda, quizás la idea de que la inteligencia y la moral vencen finalmente a la sinrazón totalitaria. Sin embargo, no tiene nada de complaciente. La brutalidad con la población ocupada es la única regla de comportamiento de los nazis. Los checos no pueden sino resistir hasta la muerte, soportando torturas y abusos de todo tipo. Sólo la integridad y la inteligencia de Janoschik, el improbable héroe de esta historia, consiguen revertir el esquema de fuerzas y hacer que los castigadores prueben su propia medicina. 

En resumen, una novela ligera pero no trivial, de escritura ágil y mesurada, extremadamente eficaz y con una trama impecablemente desarrollada. De esas que, aunque no lo digan las gacetillas de la contraportada, no hay modo de dejar de leer hasta que se acaban. 



sábado, 1 de septiembre de 2012

También se cargan "Carne Cruda", en Radio 3





Estamos como queremos. Visto el talante liberal y conciliador del PP y sus ganas de no utilizar despóticamente la mayoría absoluta que los inconscientes españoles les hemos otorgado, nada puede extrañarme ya. 

Pero me jode que se carguen (de malas maneras, a traición y por motivos exclusivamente políticos, digan lo que quieran decir) uno de los programas más libres, inteligentes, pasaos y molones de la radio. 

Todo aquel que haya escuchado Carne cruda sabrá a qué me refiero. 

Ya que Javier Gallego, su director y presentador, no ha podido despedirse de sus oyentes, lo hace en carta. Aquí está el enlace: 

http://www.eldiario.es/zonacritica/2012/08/31/radio-3-cancela-carne-cruda-ni-venceis-ni-convenceis/