Pues bien: según consta en mi partida de nacimiento y en los recuerdos familiares, hoy hace cincuenta y dos años, a las tres de la tarde, dio la casualidad que nací en Tarazona (Zaragoza), y lo que me interesa de esta circunstancia, cuestiones anímicas aparte, es que tanto tiempo más tarde sigo como otros muchos de mi generación, sin vender una escoba. Y lo peor es que dudo mucho que alguien vaya a dejarse convencer en el futuro, así que, seguiremos con el remanente en la trastienda, dispuestos a aumentarlo sin cesar.
Vaya, que estoy optimista. Y eso que aún no me ha llegado la melancolía de la constatación. Eso sucede semanas o meses después, pero tampoco es grave. Cosa climatológica (del cerebro), más que nada.
La realidad es que nos vemos arrojados al mundo, que dirían los filósofos, y nada nos facilita entenderlo si no se conoce lo que sucedió bastantes años antes de acceder nosotros. Y no me refiero solo a consultar los libros de historia. Es por lo mismo que no me parece bien que un inmigrante vote en el país de acogida: votará "en su país mental", no en el nuevo, puesto que ni lo conoce ni ha seguido y vivido su evolución en el plazo de, pongamos, veinte o treinta años. Lo que hace es aplicar los criterios, prejuicios y conocimientos de su lugar de origen al nuevo emplazamiento.
Algo así somos: desconocedores de dónde hemos caído hasta muchos años después, cuando quizá ya no importa qué entendamos, porque poco podemos hacer.
Me da la impresión de que siempre he ido a contrapelo, he estado descolocado y fuera de foco. No tengo grandes esperanzas de que lo que han sido mis últimos diez o quince años de vida vayan a cambiar en un futuro, por lo que igual está bien seguir en órbita excéntrica respecto a donde se corta el bacalao. Al menos, hago lo que me parece, lo hago cuando quiero y no doy explicaciones que a nadie se le ocurre solicitar.
Bien: voy a dejar esta digresión, porque no creo que interese demasiado y tampoco me pone de buen humor... Simplemente, celebremos lo que nos viene. No hay más.
2 comentarios:
¡A disfrutar del día! ¡Felicidades! A ver si pronto puedo dartelas en persona y comentar todas esas lecturas de mi verano.
Espero que sean muchos años más los que cumplas. ¡Ah, y también espero que disfrutes de tus vacaciones!
¡Un beso!
Gracias, Re'lar África. Me imagino que estarás pasándolo bien, casi demasiado bien. Aprovecha y ya hablaremos.
A mi me quedan dos días para llegar a mejor vida: a no dar palo al agua durante un mes, cosa que prometo.
See you, guapa.
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